Esteeee… bueh! llegó fin de año y es algo casi obligatorio escribir al respecto. A mucha gente estas fiestas los entristecen, no es mi caso, en realidad me sirven para volver a mi casa después de varios meses de no hacerlo, para volver a ver mis Sres. padres y, si se da la ocasión, ver al resto de los parientes. Por eso las fiestas no me significan ni tristeza ni felicidad extrema por sí mismas, sino que lo que me alegra es poder volver a casa y ver a los que quiero.
Eso si, no es de menor importancia destacar que a fin de año algunos tenemos la suerte de recibir obsequios. La mayoría de las veces son pavadas, cosas que no sirven de mucho, como floreros, medias, ropa interior. Yo gracias a estas fechas he logrado una completa colección de cajitas musicales o joyeritos, que permanecen vacíos y metidos en una caja, mitad porque no me gustan y mitad porque no tengo donde meterlos. También quiero agradecer públicamente la existencia de Sprayete, gracias a Uds. tengo cosas que muy bien no que para q sirven o mejor dicho, el paquete dicen para que sirven pero dudo fervientemente de su efectividad. Tengo un aparato para cortar tomates con formas raras por asi decirlo; un juego de herramientas que imitan a las de una pedicura que una vez use y no se si fue por mi inexperiencia o por mi salvajismo, pero termine con una uña tallada muy al estilo Minujin o algo así. No voy a contar lo que me paso con cierto instrumento largo, gordito, que vibraba y que no traía las explicaciones de uso en el envase… realmente nunca pensé que eso era una batidora de mano, se los juro!
Otra cosa que me llama la atención es el personaje navideño por excelencia: Papá Noel. Siempre tuve la suerte de vivir en una familia con cierta coherencia, por ello nadie tuvo, jamás, la deshonrosa idea disfrazarse del gordito simpático de barbita blanca. Pero igual existía su leyenda y como tenemos chimenea, estaba todo dado. Nunca se preguntaron por qué se viste de rojo? Si ya sé, la Coca-Cola lo creó y uso su color en el personaje pero… yo siempre creí que detrás de ese personaje había algo oscuro. Piénsenlo así: el tipo vive en un lugar lejano, al que es casi imposible llegar (pongámosle que es el Polo Norte pero podría ser Fuerte Apache tranquilamente); sale una vez al año y en una noche, mágicamente, recorre todo el mundo, ayudado por la diferencia horaria, claro esta… pero el tipo lo hace volando. Cómo? Si loco, vuela! Sé que es un personaje infantil pero todos sabemos que hay ciertas sustancias que nos hacen “volar”… uhmmmm. No será que este viejecito vive aislado del mundo, se mantiene en base a la venta de estupefacientes que a su vez consume? Sino de dónde saca el dinero para los presentes navideños? No será un espía ruso, vestido del color bolche, que se mete en nuestros hogares con el fin de conocer nuestros movimientos? No serán sus regalos aparatos espías, colocados estratégicamente en nuestros hogares a fin de controlarnos? No será Papá Noel el Gran Hermano que todo lo ve y todo lo sabe? No será que me volvió la paranoia? (si respondió positivamente la última pregunta acaba Ud. de caerme mal).
En fin… y ahora voy a hablar en serio (dije E N S E R I O!!). Navidad para mi familia, me refiero a mis viejos y mi hermano, era un momento especial. Creo que fue uno de los momentos donde conocí la dulzura de mi viejo y donde aprendí a valorar eso de estar juntos, de compartir, de vivir las cosas como algo especial aunque sea una vez al año. La mayoría de mis navidades, por no decir todas, fueron felices. De a poco la familia cambió de componentes y, es verdad, los que no están en esos momentos se sienten más que nunca, pero si los recordás es como tenerlos al lado y se extraña un poquito menos.
Les deseo una más que feliz Navidad, junto a los suyos (en realidad usen las fiestas como excusa para estar con ellos… el resto es todo paparruchada). Disfruten compartir el momento y cuando brinden háganlo también por esos que no tienen navidades felices porque la realidad no los deja, por los que no recibe ni un regalo ni un mimo para estas fechas. Si nosotros la tenemos hagamos un poquito por los que no….
FELIZ NAVIDAD! Y que Papá Noel les traiga regalitos de Sprayete (si vibra puede ser batidora de mano, no lo olviden).
Eso si, no es de menor importancia destacar que a fin de año algunos tenemos la suerte de recibir obsequios. La mayoría de las veces son pavadas, cosas que no sirven de mucho, como floreros, medias, ropa interior. Yo gracias a estas fechas he logrado una completa colección de cajitas musicales o joyeritos, que permanecen vacíos y metidos en una caja, mitad porque no me gustan y mitad porque no tengo donde meterlos. También quiero agradecer públicamente la existencia de Sprayete, gracias a Uds. tengo cosas que muy bien no que para q sirven o mejor dicho, el paquete dicen para que sirven pero dudo fervientemente de su efectividad. Tengo un aparato para cortar tomates con formas raras por asi decirlo; un juego de herramientas que imitan a las de una pedicura que una vez use y no se si fue por mi inexperiencia o por mi salvajismo, pero termine con una uña tallada muy al estilo Minujin o algo así. No voy a contar lo que me paso con cierto instrumento largo, gordito, que vibraba y que no traía las explicaciones de uso en el envase… realmente nunca pensé que eso era una batidora de mano, se los juro!
Otra cosa que me llama la atención es el personaje navideño por excelencia: Papá Noel. Siempre tuve la suerte de vivir en una familia con cierta coherencia, por ello nadie tuvo, jamás, la deshonrosa idea disfrazarse del gordito simpático de barbita blanca. Pero igual existía su leyenda y como tenemos chimenea, estaba todo dado. Nunca se preguntaron por qué se viste de rojo? Si ya sé, la Coca-Cola lo creó y uso su color en el personaje pero… yo siempre creí que detrás de ese personaje había algo oscuro. Piénsenlo así: el tipo vive en un lugar lejano, al que es casi imposible llegar (pongámosle que es el Polo Norte pero podría ser Fuerte Apache tranquilamente); sale una vez al año y en una noche, mágicamente, recorre todo el mundo, ayudado por la diferencia horaria, claro esta… pero el tipo lo hace volando. Cómo? Si loco, vuela! Sé que es un personaje infantil pero todos sabemos que hay ciertas sustancias que nos hacen “volar”… uhmmmm. No será que este viejecito vive aislado del mundo, se mantiene en base a la venta de estupefacientes que a su vez consume? Sino de dónde saca el dinero para los presentes navideños? No será un espía ruso, vestido del color bolche, que se mete en nuestros hogares con el fin de conocer nuestros movimientos? No serán sus regalos aparatos espías, colocados estratégicamente en nuestros hogares a fin de controlarnos? No será Papá Noel el Gran Hermano que todo lo ve y todo lo sabe? No será que me volvió la paranoia? (si respondió positivamente la última pregunta acaba Ud. de caerme mal).
En fin… y ahora voy a hablar en serio (dije E N S E R I O!!). Navidad para mi familia, me refiero a mis viejos y mi hermano, era un momento especial. Creo que fue uno de los momentos donde conocí la dulzura de mi viejo y donde aprendí a valorar eso de estar juntos, de compartir, de vivir las cosas como algo especial aunque sea una vez al año. La mayoría de mis navidades, por no decir todas, fueron felices. De a poco la familia cambió de componentes y, es verdad, los que no están en esos momentos se sienten más que nunca, pero si los recordás es como tenerlos al lado y se extraña un poquito menos.
Les deseo una más que feliz Navidad, junto a los suyos (en realidad usen las fiestas como excusa para estar con ellos… el resto es todo paparruchada). Disfruten compartir el momento y cuando brinden háganlo también por esos que no tienen navidades felices porque la realidad no los deja, por los que no recibe ni un regalo ni un mimo para estas fechas. Si nosotros la tenemos hagamos un poquito por los que no….
FELIZ NAVIDAD! Y que Papá Noel les traiga regalitos de Sprayete (si vibra puede ser batidora de mano, no lo olviden).
